“Un Anillo para gobernarlos a todos, un Anillo para encontrarlos, un Anillo para atraerlos a todos y en las tinieblas atarlos.”
Existe una función de la mente, Ahaṃkāra, a
través de la cual el hombre se identifica con sus procesos mentales. Dicha
unión separa al ser humano de la conciencia y crea un falso “yo”. La razón amará y justificará al ego y bajo ese velo de irrealidad el
individuo es atraido y atado a las tinieblas de su subconsciente.

El anillo representa esa preciada unión o identificación con el ego, en el otro extremo se encuentra el ojo único, las bajas esferas ocultas en "las tinieblas" del subconsciente.
Paralelismos con el mito de Polifemo contra Odiseo

Identificarse como "nadie" es precisamente el proceso de desidentificación. Sin embargo la vanidad nos hace amar y adorar este "yo" como los portadores del anillo aman a su precioso objeto.
Variante del mito en la mitología vasca
1.- En dicha versión Tártalo el cíclope, al igual que polifemo, fue cegado por una
lanza
candente para después escapar
de su cueva bajo los vientres del rebaño. (proceso de desidentificación)
- La batalla en las puertas negras fija la mirada de Sauron en el valle de Udûn cegándolo en cierto modo para que Frodo y Sam pasen desapercibidos infiltrados en un ejercito de orcos "rebaño de Sauron".
2.- Tártalo poseía un anillo mágico. Cuando su amo preguntaba al anillo “¿Dónde
estás?” este contestaba “¡aquí estoy!”. (Ahaṃkāra o identificación egóica.)
- Cuando Frodo se pone el anillo es inmediatamente localizado por Sauron.
3.- El cíclope, ya cegado, lanzó el anillo a su víctima como falsa recompensa por conseguir huir de su cueva, de este modo el monstruo pudo perseguir al fugitivo. Finalmente, en un acto de desesperación, el héroe se arrancó el dedo y lo lanzo junto con el anillo al fondo de un pozo donde el cíclope engañado cayó tras él. (desgarro doloroso del ego)
- Gollum arranca el dedo de Frodo para caer con el anillo al corazón del monte del destino.